Qué sabrán ellos de nada, de los platos apilándose en la cocina, de sábanas enredadas, ceniza en la alfombra e insomnio. Qué sabrán de los órdenes y desórdenes internos, de acabar sumido en el caos un martes por la mañana, de la belleza del polvo flotando en el haz de luz. No se si sabrán entonces que ellos no existen, yo los proyecto, su ignorancia es la propia. La duda empieza hacia uno mismo, se lanza hacia fuera, rebota y golpea duro en la cara.
Bueniiisimo como todas las maravillas que tú escribes hermanita mia.. Te quiero!! MUAKAASS!! ^^
ResponderEliminar[Quote] "No se si sabrán entonces que ellos no existen, yo los proyecto, su ignorancia es la propia"
ResponderEliminarEn el siglo XX aprendimos que cuando cerramos los ojos el mundo sigue ahí. O bien no he entendido nada, y mi comentario es profundamente impertinente.
No puedo dudar de los demás cuando leo cosas que me son tan propias, siendo ajenas. Me encanta, Fela. Ya sabes por qué.
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