Me ha hecho pensar, no como una conversación de las que cubren los huecos entre sorbo y sorbo (yo bebía café solo, porque soy un machote). Me ha hecho pensar sobretodo porque llevo mucho tiempo con esa espinita clavada: las mujeres.
Actualmente la herida supura y casi casi me planteo el celibato como recurso quirúrgico para quitarme el pegote de mierda que baña mi cerebro de malas ideas, malos sueños y malas experiencias.
No digo que todo hayan sido putadas, en absoluto. Pero hoy por hoy los jueguecitos intersexuales me resultan demasiado deprimentes. Bailar, mirar, comentar, sonreír.... ojala fueran explosiones de espontaneidad, pero no son más que detonaciones controladas para derribar defensas.
Pero espera, podemos conocernos, gustarnos, quedar para cenar, y luego darnos un beso de despedida que sepa a esperanza y a motivo de sonrisa matutina al día siguiente. Eso sería demasiado peliculero, ¿no?
Mucho mejor seguir las pautas, que para algo se han estandarizado, y poder contar el mismo tipo de historia una y otra vez. ''Es solo un royo'', ''es una cosa complicada'', ''no me lo esperaba y pasó'' blablablabla.
Todo igual, todo gris, intimidades entre dos personas idénticas a las de todos los demás.
Hasta buscar algo distinto es típico.
Y todos tenemos algo que decir, todos sabemos que existe ese juego y todos creemos tener las claves. Pues una cosa te digo amigo: tu consejo sobre cómo conquistar a esa chica me sabe a mierda cuando me despierto puteado por su indiferencia y necesito algo para parchearme el ánimo. Tus parches son muy chicos y mis heridas las acarreo desde mucho antes de que tú tuvieras consejos que dar. Y es que alguien que no sabe curar su dolor no va a curarte el tuyo por mucho que quiera, por mucho que te quiera y te quiera el bien.
Si te gusto, intenta conocerme, deja que te conozca, muestra interés y no te hagas la dura ni quieras ponerme celoso bailando con otros, que yo no bailo ni por ti ni por ninguna. Si quieres mi atención dame tu atención, y si te trato mal dímelo. Me noto demasiado cascao para seguirte el juego de chorradas.
Si quieres algo házmelo saber, sé inteligente, usa menos tus curvas y más tus labios y antes de follarme escucha lo que tengo que decir, que la seducción está en que entiendas lo que te digo, en tus ojos vivos cuando preparas una respuesta a lo que hablo. No en tus caídas de ojos, ni en tu bonito pelo que paseas delante de mi.
Querida chica posiblemente interesada,
desde ahora yo seré la tía buena
y tú el borracho.
Yo la piba pasota
y tú el que me mira cuando me agacho.
Cambiemos los papeles, alomejor así te das cuenta como yo de lo ridículo que es todo lo que hemos montado. Tanto apelar al amor propio para acabar perdiendo el culo por quien pasa de ti.
Y en cuanto al físico... si yo tuviese que esperar en el bar a que se me fuesen acercando quizás sería selectivo. Pero a Dios gracias le doy por dotarme de una predilección por la belleza más peculiar. Muchas horas (muchas muchas) de porno me han hecho renegar de lo irreal. La realidad está más buena.
Aunque no me han faltado posibilidades lo cierto es que quizás no he sido el más echao palante con las chicas con las que me he encarado. Y esa es mi cruz supongo. No las desagrado, pero la princesa no es capaz de bajar sola de la torre. Porque es una jodida malcriada. Antimorbo: hacer que uno sienta que tu atención es un favor. Me hago mejores pajas con mi dignidad y son más productivas que las horas siendo un ''caballero''. Yo no te voy a ''comer la boca'', porque no sé. No porque no quiera. Pero si te digo que voy a besarte rompo la ''magia''. Magia: que no se me salga el corazón por la boca si te me quedas mirando fijo.
Si no te lo digo exploto y si te lo digo ya no es divertido, dentro de tu jodida mente retorcida de mujer algo falla si sale de por medio la sinceridad más cruda: quilla, me gustas.
Tampoco quiero adoptar el rol manido del super hombre super seguro de sí mismo super pasota super enigmático: yo cago, al despertar me huele el pozo a cieno, tengo legañas y mocos, así que derrumba todos tus ideales masculinos de seguridad y protección, porque puedo tratarte como a una reina, pero he nacido igual de perdido que tú y yo no soy tu gentil caballero, soy un notas que lo hace lo mejor que puede y ya con eso sobra.
No me pidas que te tenga entre algodones cuando lo que quieres es ser la puta de alguien. No te voy a dar más respeto del que quieras ganarte y yo no pierdo el tiempo con putas. 3 años en ayunas dan fe de que no ando con cualquiera, aunque muchas veces me queme el continuo calentón de mi juventud.
Así que, querida chica posiblemente interesada, a ti te digo que es fácil encontrar a ese chico sensible que sabe escuchar, siempre y cuando realmente busques eso. Normalmente podrás encontrarles en la categoría de ''mejores amigos'' cogiendo polvo. Y esto es un tópico también, pero tan real que parece un chiste.
Puede ser que al repetirse tanto la misma maniobra al final la tomemos como inevitable. Tanto hablar de la individualidad y esas chorradas de cerebro tercermundista para acabar categorizados en tres o cuatro conjuntos.
Mi amor no se categoriza: lo doy a mi familia, a mis amigos y a quien quiera devolverme amor a cambio. Al fin y al cabo siento la misma presión en el pecho cuando se trata de amor, la misma nausea agradable.
Así que debe ser uno, único, mio. Lo único distinto es lo que puede uno construir en esos intercambios.
Es difícil contar todo esto sin sentir que me vendo como todos (de ahí el título).
Si lees esto, seas quien seas, espero que lo tengas muy presente cuando estemos cara a cara. Más simple no sé decirlo, pero necesito decirlo a ver si así dejo de sembrar de sinsabores mis días.
Mohamed Mohamed Ali,
el que cree que eres imbécil si al leer esto te compadeces de él.
Eres muy bueno, hijo de puta.
ResponderEliminar¡¡Vivan las princesas malcriadas!!
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